Jornada de reflexión: Suicidio en adolescentes

29.08.2017

En el Salón Auditorio de la Federación de Clínicas, Sanatorios, Hospitales y otros establecimientos de la Provincia de Buenos Aires (FECLIBA) se realizó el tercer encuentro del ciclo “Charlas de reflexión, intercambio y producción, desde las lógicas actuales de intervención y abordaje en Salud Mental y Adicciones”. 

En esta oportunidad, participaron más de 250 personas del encuentro, debatiendo acerca de la problemática del suicidio en adolescentes, la responsabilidad de los agentes de la salud, la familia y el entorno de cada uno, poniendo especial atención en la necesidad de ser escuchados, incluídos y valorados que manifiestan los jóvenes.

La encargada de la apertura fue la Lic. Karina Castro, de la Dirección de Prevención de las Adicciones y Promoción de la Salud Mental del Ministerio de Salud bonaerense. La jornada, comenzó con la presentación del trabajo de Belén Amondarain, Cecilia Aroca y Mariana Paéz titulado “Adolescentes: ¿Qué cortan cuando se cortan?”, un trabajo presentado en el marco del Primer Congreso Provincial de Salud Mental y adicciones realizado en la ciudad de Tandil (2016).

Posteriormente tomaron la palabra el Dr. Marcelo Rossi y el Lic. Germán Brusco, miembros del Dpto. de Docencia e Investigación de la Dirección de Prevención de Adicciones y Promoción de la Salud Mental, quienes pusieron en discusión el desafío de generar un “proyecto identificatorio” y un contrato narcisístico satisfactorios en una sociedad de características anómicas en esta etapa madurativa, y cómo se vincula con fenómenos emergentes tales como una creciente tasa de conductas autolesivas y/o suicidios.

10 de septiembre - Día Mundial de la prevención del Suicidio

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) más de 800 mil personas se suicidan cada año, lo que representa una muerte cada 40 segundos. El suicidio es la segunda causa principal de defunción en el grupo etario de 15 a 29 años.

Por cada suicidio hay muchas más tentativas de suicidio cada año. Entre la población en general, un intento de suicidio no consumado es el factor individual de riesgo más importante.
No obstante, se puede prevenir el suicidio adoptando medidas eficaces como la restricción del acceso a los medios de suicidio y la formación del personal sanitario.

Miembros de la OMS se comprometieron a trabajar para alcanzar la meta mundial de reducir las tasas nacionales de suicidios en un 10% para 2020.